Estamos tan pendientes, buscando "algo" constantemente. Algo de lo que hablamos todo el tiempo y que soñamos con tener.
Y te encontras frente a la duda de haberlo encontrado, entonces paras, pones un freno. Te acordas de esa vez que ya lo habías "encontrado" y de cómo te lastimo e hizo sufrir.
Pensas y no sabes si te paraliza eso o el miedo, pero ¿el miedo a qué?
Es como no aprovechar la oportunidad ¿no? O sea, tanto lo buscaste y ahora que tenes la posibilidad de tenerlo, te acobardas.
Pero ¿será cobardía? Es decir, uno puede temer a lo desconocido pero ¿por qué asustarnos de lo que queremos?
Es más, ya lo conocimos antes, ¿será que queremos sufrir? ¿qué somos adictos al drama? ó ¿será que a pesar del dolor, en el fondo, sabemos que es algo que nos llena de vida?
Nada sería más lindo que jugarsela por lo que uno quiere y después no arrepentirse.
Darle para adelante.