Quedemonos callados, me gusta pensar, me gusta imaginar. Puede ser que vos y yo nos miremos fijo un par de minutos y después nos demos cuenta y miremos para otro lado. Después yo me hago un rato la histérica y vos me decís que deje de histeriquearte, yo te pego, te muerdo, te araño y nos cagamos de risa. Y ahí llega como siempre nuestros rutinarios y ya comunes insultos, nos vamos a mirar raro, pero hay algo distinto. No hay esa confianza cómplice de antes, ahora no me da la cara para ir y abrazarte como antes hacía, hoy no te llamaría para que salgamos, la verdad esto está mal. No eramos así, nos queríamos, ¿qué pasó? Es difícil volver atrás, pero ¡cómo me gustaría! Este año fue distinto, hubiera sido genial, pero no. Como quisiera que nada hubiera pasado, me gustaría borrar millones de cosas, comentarios, hechos.